2 de agosto de 2016
La teoría de la evolución de las especies de Darwin siempre ha sido uno de los grandes pilares de la saga Pokémon desde sus inicios. Muchas de las 151 criaturas de las entregas originales podían evolucionar, bajo determinadas condiciones, en seres más poderosos y capacitados para la supervivencia y el combate. Estos elementos fueron evolucionando con el tiempo. Esta adaptación al medio se fue perfeccionando con el paso de los años, donde ya pudimos ver ciertos Pokémon como Shellos que tenían formas y colores diferenciados en función de su localización geográfica.
Éste concepto de adaptación se expande dentro del universo de Pokémon Sol y Pokémon Luna. En esta ocasión volveremos a encontrarnos con Pokémon clásicos, pero que han evolucionado de forma diferente en este mundo tropical que es la región de Alola. El caso que más ha cautivado a los jugadores es el que vemos en la imagen de arriba, donde Exeggcutor ha cambiado radicalmente a una forma más estilizada. El cambio no sólo es físico, sino que también ha pasado a tener doble tipo, siendo Dragón además de Planta.
No sólo Exeggcutor ha sufrido los efectos de la evolución. Vulpix ahora será de tipo Hielo, mientras que Ninetales añade el tipo Hada a su haber. Sandshrew y Sandlash también serán de tipo Hielo, además de Acero.
